El otro día oí atentamente cómo
aconsejabas a tus alumnos probar hasta encontrar su sitio.
Yo lo hice y nunca
encontré sitio alguno.
Te presento dos poemirijiyas para demostrar, que no
tengo sitio en este mundo. ¿Alguno de
tus alumnos sería capaz de entenderlos y darse cuenta que es lo que hace falta
hacer?
Cuando una sociedad toma la decisión
de seguir el camino en la medida de lo posible, la decadencia se vuelve terminal e
irreversible.
¿Para qué me hizo Poeta,
Dios?
Uno es lo que es y nada más.
Sólo
cuando se aspira a un ideal, la vida tiene sentido.
Cuando es imposible acercarse
a ese ideal, el edificio social comienza a derrumbarse, pues todo se ha vuelto una
farsa.
El ideal, al contrario de lo que la gente
cree
(la gente es imbécil per se),
NO
es una meta puesta en un remoto futuro,
sino la piedra angular desde la cual
toda acción tiene motivo y origen.
Si tú eres un dinosaurio, por
recordar un pasado donde había un ideal motivando una acción transformadora y
NO una farsa; trata de imaginar cuán trilobite soy yo, puesto que en mí
retoñaron ideales inmemoriales, que jamás pude haber vivido, porque quienes los
encarnaron murieron mucho antes que Chile existiese... Cuando todos creían muerta La Poesía, aparecí yo, El Último Poetirijiya.
Soy una anomalía de Xyztema
1 extraterrestre (me gusta el Jazz y NO el regetonto)
Tú tuviste tu tiempo.
Yo jamás tuve oportunidad
alguna de ser lo que vine a ser.
A este maldito mundirijiyo de mierda
NO LE INTERESA LA POESÍA EN LO MÁS MÍNIMO.
ENTONCES, ¿POR QUÉ DIOS ME HIZO POETA?
EJERCICIO EMOTIVO
N°1:
Ontofanía.
Que tu hacer NO
limite tu pensar.
“Que tu pensar NO limite tu saber”.
(Lema de la escuela Ki Hand Do)
Que tu saber NO
limite tu Zentir.
Que tu Zentir NO
limite tu Bybbyr.
Que Bybbyr NO limite
tu Ser.
Que tu Ser NO impida
YluminamArte.
¡Bienvenido
a la Edad Media 2.0!
EJERCICIO EMOTIVO
N°2:
Auctoritas
Podemos huir de Todo,
pero sólo podemos
escapar de la Felixidad.
Podemos huir de la
Libertad,
pero sólo podemos
escapar de la Ilusión.
Podemos huir del
Deber,
pero sólo podemos
escapar de la TraiZión.
La Felixidad, etc.,
nos arrebatarán
“cuando menos la esperemos”,
cuando nos abramos a
Eya, (re)suscitándonos
desde el Abismo de la
In-diferencia.
No hay comentarios:
Publicar un comentario